Inteligencia Emocional Laboral

En colaboración con Psic. Anabel González.

Todos conocemos la inteligencia académica, creativa o analítica, pero recientemente, la inteligencia emocional está llamando la atención. La inteligencia emocional es una forma de comprensión que consta de cuatro habilidades: La primera es tener conciencia, tener la capacidad de identificar y etiquetar las propias emociones y las de los demás. La segunda habilidad, es la capacidad de aprovechar las emociones y aplicarlas a tareas como el pensamiento o la resolución de problemas. Aquellos con mayor inteligencia emocional pueden usar sus emociones para guiarlos hacia sus tareas actuales. La tercera es comprender las emociones y tener el poder de ser empático y sensible a las variaciones entre las emociones. Finalmente, la cuarta es manejarlas, lo que incluye tanto regular las propias emociones como ayudar a otros a regular las suyas. Con esta habilidad, las personas emocionalmente inteligentes no solo pueden aprovechar las emociones positivas y negativas, sino que también pueden manejarlas para lograr sus objetivos.

Actualmente, la salud mental es un tema que está causando curiosidad alrededor del mundo, puede ser que en generaciones pasadas se tenía la información, pero no se daba a conocer o no era tema importante. Con el avance de la tecnología y medicina, se ha llegado a la conclusión que sí es importante tener en paz nuestra mente para poder rendir en todos los aspectos de la vida.

La Organización Mundial de la Salud plantea: “La salud mental abarca una amplia gama de actividades directa o indirectamente relacionadas con el componente de bienestar mental incluido en la definición de salud que da la OMS: «un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades».” Es así que nos quitamos la mascara del pensamiento que tener salud no es solo ausencia de enfermedades, si no que abarca muchos otros factores, los cuales se requieren para llegar a una vida plena.

Ahora bien, si nos enfocamos a la salud mental dentro del ámbito laboral nos estamos acercando al término de “inteligencia emocional laboral”; el tener en control nuestras emociones dentro de un área de trabajo es sumamente importante para ser exitosos en el puesto que tengamos, no perder el raciocinio y concentrarse en lo que se quiere hacer o decir.

¿Líderes o jefes?

¿A qué nos referimos con líderes? A personas que motiven y capaciten, que sepan trabajar en equipo y que compartan ideas. La inteligencia emocional, no solamente es llegar de buen humor al trabajo, es empezar de un buen humor el día para poder rendir durante el trabajo y salir motivado, para saber que el próximo día será un día mejor. En cambio, ¿Qué es lo que pasa hoy en día? Pasa que los trabajadores van con ganas de subsistir y no de vivir, y es aquí cuando el rendimiento de la empresa baja, cuando sus empleados se desmotivan y simplemente ven un día de trabajo como un día igual a todos.

La base de toda empresa, son sus mismos empleados, si tenemos empleados motivados y felices, tendremos resultados exitosos, y eso favorece en el ámbito laboral y social, ya que una empresa siempre tendrá un propósito en la sociedad: el servir y el dar.

Estamos tan inmersos en el trabajo, en sacar las cosas día a día, que pensar en un futuro muchas veces nos aterroriza, pero la realidad es que ver mas allá nos ayuda a plantear metas, esto mismo pasa en una empresa. Si una empresa está comprometida con sus empleados, se verá favorecida de muchas maneras. Debemos evitar el estrés laboral, ya que este nubla nuestra mente y no hay claridad, por lo tanto, no sacaremos adelante las tareas presentes y futuras.

¿Qué se recomienda hacer?

Se recomienda constantemente realizar cursos y talleres con el fin de que los empleados y la empresa crezcan. Igualmente, no dejar que los empleados olviden los valores esenciales tanto morales como laborales. Seguir fomentando el compañerismo, comunicación, honestidad y respeto por ellos mismos, por los demás y por el lugar donde se desarrollan, aún siendo adultos no se tiene porqué olvidar los valores.

Al igual que fortalecer un músculo con ejercicio físico, la inteligencia emocional también se puede desarrollar a través de la práctica y la aplicación. Algunas formas de mejorar esta habilidad y, ahora competencia, son:

  1. Trabajar para aumentar la autoconciencia permitiendo que surjan sentimientos negativos sin un esfuerzo por evitarlos o juzgarlos. Cuanto más sincero seas contigo mismo, más rápido podrás identificar lo que estás experimentando desde dentro.

  2. Manejar sus emociones reflexionando objetivamente para ver si sus emociones son adecuadas para la situación y luego actuando en consecuencia.

  3. Practicar la empatía y reconocer las necesidades emocionales de los demás. Podemos hacer esto tomando conciencia de las señales verbales y no verbales para tratar de comprender las perspectivas de los demás, y poniéndose en su lugar.

  4. Conocer sus factores estresantes haciendo un seguimiento de las cosas que aumentan tu nivel de estrés, y ser proactivo en tomar medidas para minimizarlos.

  5. Encontrar formas de manejar la adversidad practicando optimismo, haciendo preguntas constructivas y tomando la iniciativa hacia soluciones.

La importancia de un psicólogo en una empresa

Creemos que al momento de salir de casa dejamos todos nuestros problemas ahí, sin embargo, aunque no sea consciente, los problemas siempre están latentes y se manifiestan de distintas formas. Esto quiere decir, que si tenemos un problema de pareja, familiar o social, ese problema se va a manifestar en una distracción laboral, un error o un mal comportamiento con compañeros o bien con un empleado con un puesto superior o inferior, podemos no hablarlo, pero ese sentimiento se manifiesta de distintas formas, como ya lo mencionamos.

Por estas y más razones, el contar siempre con un psicólogo laboral, ayudará bastante en el mejoramiento de los trabajadores, que son pieza clave para que la empresa obtenga los resultados deseados. El psicólogo trabaja a la par con los empleados y con las metas de la empresa, para crear una sintonía. Crear un ambiente laboral ameno, donde se encuentre todo lo que un empleado necesite para realizar bien su tarea debe ser un requerimiento indispensable.

Los seres humanos somos sociables por naturaleza, el dialogar y ser escuchados de manera asertiva nos hace sentir mejor, el contratar psicólogos, para que los empleados logren descubrir y nombrar sus emociones adecuadamente, y el tener un dialogo razonable los hará ser mas autocríticos, verán las situaciones de manera distinta y funcionaran mejor dentro y fuera de la empresa. Se trata no sólo de crear buenos empleados, si no personas e individuos capaces y seguros de sus aptitudes, y habilidades sociales y emocionales.

En conlusión, una mayor inteligencia emocional se correlaciona positivamente con una mayor capacidad social y de interacción. Esto lleva a relaciones interpersonales más positivas. Las personas con mayor inteligencia emocional tienen mayores logros académicos, mejor desempeño laboral y más habilidades de negociación. A menudo son entrenadores y líderes más efectivos, así como más exitosos en los negocios. En general, las personas con mayor inteligencia emocional muestran un mejor bienestar psicológico al tener más autoconciencia, una mayor capacidad para controlar emociones fuertes y relaciones más profundas e íntimas al empatizar con los demás.

Psic. Anabel González es egresada de la licenciatura en Psicología de la Universidad Autónoma de Sinaloa.